Ir al contenido principal

Ollas comunes: cuando la subsistencia significa resistencia

Hace unas semanas, pudimos ver el actuar de la policía en contra de vecinxs del territorio denominado La Granja, en donde, haciendo uso de sus máquinas de represión fueron y, voltearon una olla común que se organizó debido a la creciente escasez de alimentos que se produjo en el contexto de la cuarentena por el Covid-19. Este contexto vino a hace rmás visible aun la brecha de desigualdad de clases que está sumamente normalizada, como si hubiera un límite de pobreza tolerada, y permitida. Ahora que se nos aparece con esta violencia, nos parece inadmisible, nos indigna, nos volvemos críticxs, pero… la pobreza ES una forma de violencia que se impone en el modelo capitalista.

 La burguesía acomodada vive en su paraíso de estabilidad material mientras las clases explotadas están todo el tiempo parando la olla apenas en el cotidiano, muchas veces con un ingreso per cápita que con suerte alcanza el dólar diario para toda una familia. El umbral de la pobreza que la sociología y la economía ponen encima nuestro para medirnos es una burla, porque se utiliza para validar que existen porcentajes altos de la poblacion que viven con más de un dólar, y el resto, ¿dónde quedan? ¿es ese porcentaje de pobreza permitido por el modelo? Y ahora, para tratar de silenciar las olas de manifestaciones por hambre que aparecen, se despliegan dispositivos de guerra, guanacos, zorrillos, balines, granadas de mano abandonadas en plazas, y para rematar, la intervención policial y militar en barrios que empiezan a autoorganizarse.

 Este escrito no es para romantizar las ollas comunes, sino para resaltar su contenido de resistencia. Esa resistencia que se construye desde la colectividad en la que no nos quieren. Por eso buscan separarnos, atomizarnos, reducirnos. Resistencia a las políticas de la muerte, al peso de la miseria institucionalizada, resistencia al abandono intencional y calculado del Estado hacia nosotrxs. En todos los territorios aparecen espacios de solidaridad (en Arica, por ejemplo, apareció un almacen solidario que se basa en el trueque), que van a intentar ser reprimidos, censurados, apagados, para que sigamos dependiendo de las empresas, el mercado, y que sigamos sin encontrarnos para construir vida colectiva. Pero ante la pobreza que nos impusieron, no podrán lograr que dejemos de encontrarnos para existir, y resistir. Amapola, la mariposa okupa

Por Amapola, la mariposa okupa, en Boletín Sedición n°2. Link de descarga: https://lapeste.org/2020/05/boletin-sedicion-no2-publicacion-de-la-asamblea-libertaria-cordillera-lanzamiento-4-junio/

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Desafíos filosófico-educativos ante la feminización del sistema penitenciario: Perspectivas críticas ante las políticas securitarias y la criminalización de las crianzas en Chile

  Resumen: El proyecto de memoria pretende ser una continuidad y profundización de la tesina, que tenía como objetivo el estudio filosófico de la relación entre roles e imaginarios de la mujer en el proceso de feminización del sistema penitenciario. Ahora, el enfoque incluirá una indagación filosófica sobre las repercusiones en las relaciones de crianza que se dan en las unidades materno-parentales de los centros de detención penal en Chile. La pertinencia disciplinaria (filosófico-pedagógica) de esto radica en la urgencia de conceptualizar y construir herramientas teórico-prácticas enfocadas en esta actualización/transformación del sistema carcelario y en las tecnologías sexo-género que operan tanto en las políticas securitarias como en el propio sistema carcelario. La necesidad filosófica de estudiar esto es poder comprender distintos escenarios de vulneración que se dan como resultado de contextos precarizados, e interpretar cómo las medidas institucionales profundizan dicha pr...

De la irreconciabilidad con el presente en el cine chileno: Cinematográficas an-estéticas del desencanto

De la irreconciabilidad con el presente en el cine chileno: Cinematográficas an-estéticas del desencanto. [1] - Amapola Fuentes “Soñábamos con utopías y nos despertamos gritando.” Roberto Bolaño La siguiente potencia trata sobre una impronta muy específica del cine chileno, y cómo este refleja la irreconciabilidad con el presente mediante estéticas que desafían las lógicas de la industria cinematográfica convencional. Para partir: Se suele pensar que el quehacer cinematográfico se tornó hacia la visibilización de la marginalidad, la precarización de la vida y los fenómenos biopolíticos de control autoritario, luego de lo sucedido (o, más bien, impuesto) con la Dictadura militar de 1973. Incluso, en ocasiones se critica que el cine chileno está “traumado” con este hito. ¿Y cómo no estarlo? Especialmente cuando, la realidad del cine chileno es que desde antes del golpe de estado, ya encontraba el lente enfocado en la denuncia social y el posicionamiento político. Antes del neol...

El mundo como ausencia y proximidad: interrupción y potencia

 El presente informe de lectura pretende abordar un tema que trabaja Blanchot en su apéndice “las dos versiones de lo real” respecto de la cercanía, comprendida como lo que es a la vez distancia. Este autor hace una especie de vuelco a toda la tradición filosófica tradicional occidental, que se enfrascó por siglos en la relación entre sujeto e imagen, para dar una connotación de inmediatez y de presencia respecto de la imagen y lo que aparece. Este vuelco se encuentra en la incorporación de una nueva lectura que el autor hace de la imagen y su relación con la semejanza, para mencionar que, de hecho, la imagen es lo que deshace, lo que hace des-aparecer desde su re-aparición. En vez de generar un vínculo intersubjetivo de Verdad en torno a la percepción y el objeto, apuesta por esa distancia entre lo que se aparece, haciendo una apertura en el campo de la percepción y construcción de una identidad que, en este caso, está marcada por la imposibilidad, la huida, y la combinación entre...